Aunque hoy en día el vuelo sin motor está eclipsado por el vuelo comercial, su larga tradición en Alemania, patria del pionero de la aviación Otto Lilienthal, sigue intacta. Esto se debe en parte a los "Akafliegs" -organizaciones repartidas por toda Alemania cuyo nombre es un portmanteau de las palabras alemanas "akademische Segelflugvereine", en español "clubes académicos de vuelo sin motor"- que ofrecen oportunidades únicas a estudiantes y jóvenes ingenieros. Aquí no sólo pueden adquirir una valiosa experiencia práctica en aerodinámica, diseño de aeronaves, mantenimiento de aeronaves y muchos otros campos, sino también, como ventaja añadida, obtener una licencia de piloto de planeadores con descuento y participar en competiciones, hasta llegar al desafiante vuelo acrobático.
Akaflieg München es una organización histórica con proyectos ambiciosos: Fundada en 1924, cuando los vuelos motorizados estaban prohibidos en Alemania tras el Tratado de Versalles, hoy cuenta con unos 40 miembros (estudiantes y antiguos alumnos). Desde su aeródromo de Königsdorf, a unos 20 km al sur de Múnich, despegan en vuelos de ida o de ida y vuelta alrededor de la capital bávara, así como a los cercanos Alpes, un lugar especialmente espectacular. Además, también operan en Múnich empresas de construcción de la TU de Múnich y otras universidades, con especial atención al Laboratorio de Desarrollo de Productos y Diseño Ligero (LPL) de Garching. Muchos de los aviones construidos por Akaflieg München han marcado hitos y siguen volando hoy en día, por ejemplo el avión acrobático y de remolque motorizado Mü-30 "Schlacro" (2000) o el Mü-28, uno de los planeadores más rápidos de todos los tiempos (velocidad máxima permitida 380 km/h), que realizó su vuelo inaugural en 1983.